Este
es otro de los países balcánicos que en su caso está generosamente compensado
por costa de Dalmacia, sobre el mar Adriatico, donde entre un buen número de pueblos
preciosos destacan dos ciudades maravillosas como lo son Split y Dubrovnik.
Tierra adentro aparece la capital del país: Zagreb, que aunque es menos
atractiva no deja de ser interesante.
El
territorio croata incluye más de 1100 islas y en verano los transbordadores que
incluso unen el país con varios puertos de Italia desempeñan un papel
preponderante en las áreas de comercio y turismo. Por aquí los precios
estuvieron por los suelos, pero cada vez están más cerca de alcanzar a los del
resto de Europa. Las comunicaciones con el exterior son excelentes y las aerolíneas
de bajo costo deben competir con la buena oferta que ofrecen los autobuses. Es
un país muy preparado para el turismo; abunda la oferta de hospedaje, sus
playas son preciosas, el color del mar es hermoso y en las ciudades antes
mencionadas la juerga representa para locales y foráneos un encanto.
La Isla de Hvar, es un lugar que siento necesidad de destacar.
La ciudad amurallada de Hvar, de la que toma el nombre la isla, es muy pequeña y todo
gira en torno a un pequeño puerto. En este sitio coqueto como en todo el resto
de la costa de Dalmacia vamos a encontrar casas exuberantes e incluso viejos palacios
que hacen honor al buen gusto de la aristocracia croata. En lo alto de la ciudad
hay un castillo, patrón de las vistas, al que se llega andando.
En
la isla hay otra ciudad importante llamada Stari Grad, que significa
“ciudad vieja”. Este lugar, que también es bonito, no tiene el atractivo de la
capital y por esa razón los precios que vamos a encontrar allí son más
acomodados.
Todo
el mundo quiere ser Ibiza pero yo, que pasé muchos veranos de mi vida en ese
sitio maravilloso, os digo que nadie jamás podrá conseguirlo. De todas maneras
la isla Hvar está haciendo las cosas bien y por esa razón va ganando prestigio,
hasta el punto, de haber logrado ser un punto de referencia para el jet set de
todo el mundo. Por esa y otras razones, con el glamour por los cielos, toda la
isla es una sola juerga donde los escenarios son de lo más variado; los veleros
que se juntan en el puerto; las playas y por supuesto las grandes discotecas.
En Hvar la música y el show no se detienen durante todo el verano
Split en la costa de Dalmacia-Croacia
Documental
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