Un artículo que nos trae un tema hermoso salpicado por situaciones que enfurecen a los amantes de los animales.
El templo que está ubicado en territorio de Tailandia no muy lejos de la frontera con Myanmar, recibió el primer ejemplar en 1999. Lamentablemente el animal falleció al poco tiempo de llegar pero, de todos modos, este desafortunado primer paso sirvió de precedente y cuando otros cachorros fueron privados de sus madres por el salvajismo de cazadores furtivos los aldeanos les llevaron al Templo. Así comenzó una hermosa iniciativa que desde mi punto de vista ha cogido por mal camino porque el Templo dejó de serlo para transformarse en una especie de parque temático que no mira más allá del lucro. Dando pasos, por el lugar, veo a un ejército de voluntarios, muchos de ellos occidentales, entrenados para vender productos relacionados con las actividades de los animales: darle el biberón a las crías o ir a la cascada para verles en agitadas escaramuzas son algunos de los ejemplos que cuestan una suma extra.
Dentro me siento dinamita y mi piel arde como una mecha, cuando observo con detenimiento y veo que los animales vienen tratados como mercancía. Insisto de que es una impresión muy personal que, tal vez, otros visitantes no compartan porque la belleza de los tigres minimiza todo el resto.
Leyendo un poco para hacer esta presentación en Wikipedia encuentro un reporte de la "Care for the Wild" que acusa al Templo del Tigre de hacer caso omiso de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas por estar involucrado en el intercambio clandestino de tigres con un criador de Laos. Esta organización dice que el lugar opera como un centro de cría de tigres carente de licencia como lo exige la Ley de Animales de Tailandia. Además, afirma que los problemas que impiden el bienestar del animal en el Templo del Tigre son muy graves porque el alojamiento es inadecuado y el ambiente no es compatible. Faltan cuidados veterinarios y el abuso físico de los tigres para entretener a los turistas es terrible.
Así están las cosas por aquí. Hubiese sido más fácil hablar bonito y colocar fotografías graciosas, pero no hubiese sido justo para ustedes, para los animales y mucho menos para mí que escribo fiel a lo que veo, siguiendo con fidelidad las huellas que dejan lo que pienso.
Fotos tomadas en marzo del año 2011
Para darle a este reportaje derecho a réplica agrego una grabación oficial del sitio y omito cualquier comentario sobre este material que no soy capaz de terminar de ver.
Entonces en este punto, no sin antes despedirme, salto del coche en marcha.
¡Sean felices!
No hay comentarios:
Publicar un comentario