Antiguamente
llamado Ceilán, es un país que ocupa todo el territorio de una isla rodeada por el
Océano Indico al sur de India. A este sitio privilegiado por la Naturaleza llegué
en el año 2004 buscando un lugar donde sentarme para terminar mi segundo libro:
”La Llave”.
En
esa época el centro de Colombo, así se llama la capital, estaba blindado, por las fuerzas del Gobierno que en ese
momento se encontraban en estado de alerta debido a las constantes refriegas
con la insurgencia de los: “Tigres de Liberación del Eelam Tamil”. Recuerdo
que había una cuota de peligro porque
estos descerebrados estaban muy activos poniendo bombas y matando gente.
Basura terrorista de la que este maravilloso pueblo parece haberse liberado en
el año 2009. La urbe capitalina que mira al mar se presta para dar paseos y
palpar costumbres de los ciudadanos de otro de los sitios superpoblados de
Asia. Además, en la zona de la oficina de turismo se encuentran las casas de suovenires
con los mejores precios.
 |
| Colombo |
De
Colombo a Galle hay un tren muy lento que demora 4 horas para recorrer 100 kilómetros,
el mismo tiempo que emplea el autobús porque la mal llamada carretera no
soporta el flujo actual de tráfico. En
los primeros tramos recuerdo que seguía con curiosidad la inventiva de la gente
para construir habitaciones precarias en la escasa franja de terreno que hay
entre las vías y el agua del océano.
Conociendo
ese lugar sufrí en carne propia cuando recibí la noticia del tsunami desbastador
que azotó la zona. Mi cabaña estaba frente a la playa en las afueras de Ambalangoda,
y gracias a un contacto supe que en la catástrofe había perdido algunos amigos
pero me reconfortó saber que los que quedaron tenían fuerza para salir
adelante.
En
mi estancia en Sri Lanka tuve oportunidad de recorrer toda la costa y ver cosas
maravillosas referentes a mar y playas, mientras que tierra adentro me sorprendió
la vegetación que trepa las montañas cunas de templos maravillosos.
 |
| UNESCO |
También
llamada La Roca del León, es una elevación de 200 metros que sale de la nada en
una planicie. En este sitio hoy patrimonio mundial de la UNESCO, los antiguos
reyes se construyeron una ciudad real, con un sistema de irrigación y de
defensa muy trabajado. Para los que conocen Masara en Israel, les comento que
los sistemas tienen un gran parecido, a pesar de que cada sitio tiene
condiciones climatológicas opuestas.
|
| UNESCO |
Es
una ciudad conocida como la capital de las montañas, ubicada a 115 km de Colombo, que destaca por su
belleza y por ser el corazón del budismo, declarada Patrimonio de la
Humanidad por la Unesco en el año 1988. En los alrededores
de Kandy hay importantes plantaciones de té y en el centro urbano hay muy buenas tiendas que venden el producto en envases exquisitos.
|
| UNESCO |
Fue
fundada por portugueses en el siglo XVI, alcanzó su apogeo con la llegada
de los británicos en el siglo XVIII y es el mejor ejemplo de ciudad fortificada
construida por los europeos en el sur de Asia que desde 1988 tiene el honor de ser Patrimonio de la Humadidad por la UNESCO.
|
| UNESCO |
Se encuentra cerca de la ciudad de Dambulla y esta ubicado dentro de una roca circundada por llanos. Este sitio tan particular del budismo es un complejo de templos desplegados en el interior de unas cuevas y contiene estatuas y pinturas de un valor altamente significativo. Incluidos los alrededores hay más de 80 cuevas documentadas.
Es un orfanato de elefantes que se inauguró en el año 1975 y fue un lugar pensado para que todos aquellos elefantes que aparecieran lastimados o con problemas, allí sean asistidos. A continuación, un set de fotografías les va a ilustrar el resto de la historia de este lugar fantástico.
Son hombres de mar que cogen posición a unos 20 metros de la costa. Estos artistas del equilibrio que suelen pasar toda la jornada sobre el agua, además, se destacan por pescar sin cebo y atraer a los peces únicamente con el movimiento de la caña.
Les
dije que venía a terminar un libro, pues ahora en la siguiente dirección lo pueden pedir y en
formato e-Book os envío totalmente gratis. goodmorningjoe@yahoo.es
A
continuación agregó una curiosidad de este amigo que tiene 279 páginas.
La Llave
PALABRAS DEL LIBRO mismo
Mi nombre es: “La Llave”, y nací un
6 de diciembre del año 2002 en el barrio de Wimbledon - Londres - Inglaterra.
En Namibia y Sudáfrica gané unas pocas páginas. Algunas líneas también se unieron
a mí en los Emiratos Árabes donde sin miedo llegamos el mismo día que empezó la
Guerra del Golfo. Volvimos a Londres a recoger sus cosas; desde allí cruzamos a
Francia, por carretera atravesamos ese país maravilloso y llegamos a la perla
del Mediterráneo. En España me pidió que le acompañe a Ibiza. Ahí el verano me
robó el protagonismo y no recibí ni una mísera letra y mucho menos una idea.
Pero no le guardo rencor por aquello, al contrario, en esa isla mi corazón se
llenó de alegría. Con estrellas y cometas como único equipaje un día de octubre
del año 2003 llegamos a Múnich, donde nos recogió una muchacha: a mí, a él y a
su perro. Es una buena persona y a los tres nos dio cobijo, allí mi compañero
estaba a gusto y en mí metió más páginas pero un día que escribía la palabra:
“Libertad”, sacudió su esqueleto. Entonces dejamos el perro, dejamos Suiza,
desafiamos las nieves, el crudo invierno, cruzamos Austria, los Balcanes,
Bulgaria y llegamos a una vieja conocida
suya: Turquía. Al que me escribe, no sabría describirle con palabras,
aunque en mis adentros llevo lo que de él pienso. Este hombre que a veces
quiere cambiar el mundo y no hace nada, es quien me nació, me creció y quien
hasta el final me dará forma. Igual no penséis que porque hizo todo eso por mí,
tiene derecho a llenarme con lo que le parezca. Él redacta y cuando duerme, yo
me levanto, me leo y si es necesario me corrijo. El show debe continuar. El viaje debe seguir. Así es él y así me
enseñó a mí. Un día le vi con la vista perdida en la superficie de líquido de
una taza de café en un bar de Estambul. Nosotros hablamos poco pero aquel día
creí que le preocupaba y pregunté: «¿Qué pasa Diego?». Entonces
respondió: «Necesitamos buscar un sitio donde tú puedas crecer y ser feliz». Cómo le
gustan las tierras árabes, alegre me paseó por Bahréin porque las temperaturas
habían cancelado de su mente el invierno pero yo a fuerza de ser sincero digo
que no estaba a gusto porque me molesta sentir los granitos de arena del desierto
en mi cuerpo. Otra vez en las alturas y en eso coincidimos porque a los dos nos
gustan los vuelos, cruzamos los cielos y llegamos al lugar elegido: el antiguo
Ceilán, ahora Sri Lanka. Qué picante es la comida pero a él le encanta. Come
siempre fruta y yo, con el miedo metido en mis hojas, siento que en cualquier
momento me mancha. Cogimos una cabaña que a mí no me gustaba. Escribió un papel
de apuntes y lo pegó en mi frente para que me quede claro, decía: “Aquí te
harás hombre. Más vale una cabaña no tan bonita frente al mar, que un palacio,
alejado de tanto poder y energía”. Fue en las afueras
del poblado de Ambalangoda, que estando muy bronceado escribió la
palabra: “Fin”, en mi última hoja. Ese momento lo llevo grabado en mi corazón,
22 de enero del año 2004.
El Libro
No hay comentarios:
Publicar un comentario